2018











 



 De listos e inteligentes, de tontos y esclavos (30 de marzo de 2018)
Pues no está mal, no. Eso de ser el centro del universo, de situarse más allá del bien y del mal. Ejercer el poder, sea de la forma que sea, por legitimidad o por insistencia, tal vez conlleve una gran responsabilidad pero tiene sus contraprestaciones positivas y seguramente de más valor que las negativas. El poder, siempre el poder, que alguien definió como la capacidad para definir las reglas.

Que paren el mundo, que yo me bajo (17 de junio de 2018)
Que paren la vida que yo me bajo. Bueno, no, tampoco es para tanto, uno no puede bajarse de la vida porque esa no es ni ha de ser una opción, porque supone el final del camino, porque es una falta de respeto hacia uno mismo y hacia lo que les quieren, y por tantos otros factores que normalmente no se tienen en cuenta cuando uno se baja de verdad.

Por haber de todo (2 de julio de 2018)
Qué triste me resulta ser de esas personas que están en el mundo por haber de todo. Cuando miro a mi alrededor observo a una pléyade de triunfadores, de abnegados luchadores que con su esfuerzo, su gestión de las emociones, su empoderamiento y su elevada autoestima son capaces de enfrentarse a los problemas más difíciles y salir airosos de ellos.

Ande yo caliente y ríase la gente (22 de julio de 2018)
Menuda tardecita de domingo zamorana. Paseando por los jardines del Castillo me encuentro con que el Ayuntamiento ha puesto unos servicios de uso público. Bueno, quizás llevasen mucho tiempo allí pero yo no había reparado en su presencia y ahora, con unos cuantos carteles señalizándolos, se antojan poco menos que invisibles. Y no sólo para mí, también para el resto de la ciudadanía que me consta que hace uso de ellos, como yo también hice esta tarde.

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